Eso decía Sócrates. Según lo que nos ha llegado de su trabajo, Sócrates, se dedicaba a no pre-juzgar nada y lo que hacía era preguntar, curiosear, no se anticipaba a la respuesta del interlocutor, no creía que sabía algo y se limitaba a ver si lo que iba encontrando era pro o contra eso que él ya sabía.
¿Cuándo fue la última vez que pudiste ponerte así ante el mundo? No es una posición fácil, porque si nos ponemos así, en una actitud de no sé, puede ser que se nos desmonte todo aquello que sí creíamos saber. Creo que todxs tenemos una idea de como son las cosas, como funciona el mundo y exponernos a que eso cambie no es fácil.
A la vez es la única manera de escuchar al otrx. Normalmente no escuchamos, muchas veces esperamos nuestro turno para contestar, para decir la nuestra, para convencer al otro, para tener razón... y así nos perdemos la oportunidad de aprender, de escuchar, de dejar entrar nueva información. Solo escuchamos a los "nuestrxs" (sesgo de confirmación le llaman), atendemos a aquello que corrobora nuestra historia.
Y sigo pensando que toda esa defensa impide también que aprendamos algo nuevo o que enriquezcamos nuestra vida con nuevos puntos de vista.
Pero atravesar esa barrera no es fácil, nos va mucho en ello, porque nosotros somos eso. Y ¿si ya no soy eso, qué soy? Y conectar con la duda, la incertidumbre, son todas cosas que nos nos hacen sentir segurxs y por eso son costosas.
Solo sé que no soy nadie: que soy en contínua evolución y aprendizaje, que no soy la misma que ayer, que mis células mutan y que cambiar es bueno porque es adaptativo, y que fijarse en lo mismo día tras día sin mirar lo que hay alrededor sólo me puede empobrecer como persona.
Además, mirar con más curiosidad el mundo en el que vivimos también aporta más felicidad y hace de la vida un lugar más habitable en tanto que una novedad constante.
Haz la prueba y escucha a otrxs solo por escuchar, a ver que pasa. Escucha y no contestes de inmediato, quédate con la info y procésala, algo será diferente seguro.
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